
El Dr. Luis Diaz Jr. ha hecho importantes descubrimientos sobre mutaciones genéticas en tumores que permiten predecir qué pacientes responderán bien a la inmunoterapia.
Qué es el tratamiento contra el cáncer con inmunoterapia
La inmunoterapia es una forma de tratamiento contra el cáncer. La mayoría de los tratamientos contra el cáncer utilizan fármacos o radiación para atacar directamente a las células cancerosas. En cambio, la inmunoterapia potencia la capacidad natural del sistema inmunitario para combatir el cáncer. El sistema inmunitario ataca las células cancerosas de la misma manera que ataca las bacterias o los virus.
La inmunoterapia contra el cáncer ha mejorado mucho en los últimos años. Memorial Sloan Kettering Cancer Center (MSK) trabaja constantemente para seguir mejorando la inmunoterapia contra el cáncer.
Los investigadores están estudiando si la inmunoterapia puede utilizarse para muchos tipos de cáncer. Los pacientes de MSK pueden participar en estudios de investigación, también conocidos como ensayos clínicos. Es posible que pueda acceder antes a tratamientos de inmunoterapia nuevos y prometedores.
¿Cuáles son los tipos de inmunoterapia?
Existen tres tipos principales de inmunoterapia. El tipo de inmunoterapia que recibe depende del tipo de cáncer, la genética del tumor y otros factores.
Inhibidores de puntos de control
Los inhibidores de puntos de control funcionan liberando un freno natural del sistema inmunitario. Esto permite que las células inmunitarias llamadas células T reconozcan y ataquen los tumores.
Terapia celular adoptiva
Estas son versiones naturales o modificadas de las propias células inmunitarias. Podemos cultivar una gran cantidad de estas células en un laboratorio. Luego, las reintroducimos en el cuerpo. Tener más de estas células es como contar con un ejército más grande para combatir el cáncer de forma natural. Estas terapias a veces se conocen como “fármacos vivos” e incluyen CAR T y TIL:
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Terapia de células T con receptor de antígeno quimérico (CAR T)
La terapia con células T con receptor de antígeno quimérico o CAR T, es un tipo de inmunoterapia. En esta, los científicos modifican los genes de las propias células inmunitarias del paciente en un laboratorio. Luego, las células pueden producir una nueva proteína que hace que sean más potentes en la lucha contra el cáncer. -
Linfocitos infiltrantes tumorales (LIT)
Los linfocitos infiltrantes tumorales, conocidos como LIT, son un tipo especial de glóbulo blanco que ha infiltrado (invadido) un tumor en el cuerpo. La terapia con LIT extrae estas células inmunitarias desde el interior del tumor. Se cultivan en grandes cantidades y luego se reintroducen en el cuerpo.
Vacunas contra el cáncer
Las vacunas contra el cáncer, como todas las vacunas, preparan el sistema inmunitario para defender al cuerpo contra posibles amenazas. Las amenazas pueden provenir de invasores externos, como un virus, o de células anormales, como las del cáncer. Las vacunas contra el cáncer se crean para prevenir o tratar el cáncer. Estas entrenan al sistema inmunitario para que detecte células dañinas que tienen marcadores llamados antígenos.
¿Cómo se administra la inmunoterapia?
La inmunoterapia puede administrarse de dos maneras:
- Fármacos que se pueden usar directamente, que están listos para su uso, sin necesidad de ser creados específicamente para cada persona. En general, estos medicamentos se administran por vía intravenosa (IV), o sea, directamente en una vena. Pembrolizumab e ipilimumab son ejemplos comunes.
- Terapia celular, que consiste en extraer y modificar las células inmunitarias propias del paciente. Luego, las reinfundimos (es decir, las volvemos a introducir) en el cuerpo por vía intravenosa para tratar el cáncer.
¿Qué tipos de cáncer puede tratar la inmunoterapia?
La inmunoterapia funciona bien en tipos de cáncer que tienen marcadores que el sistema inmunitario puede reconocer. Algunos ejemplos son:
- Tipos de cáncer con muchos cambios genéticos (mutaciones o variantes). Son buenos objetivos para la inmunoterapia porque no se parecen a las células normales. Algunos tipos de cáncer presentan muchas mutaciones debido a un daño genético. Por ejemplo, la luz solar puede dañar los genes de una célula y causar melanoma. Fumar cigarrillos puede provocar cambios genéticos y causar cáncer pulmonar. Algunos trastornos genéticos pueden aumentar la probabilidad de que las células sufran mutaciones y causen cáncer. Un ejemplo son algunos tipos de cáncer de colon.
- Tipos de cáncer con niveles altos de expresión de PD-L1. Algunos tipos de cáncer producen una proteína llamada PD-L1. Esta proteína funciona como un freno para las células inmunitarias, y bloquea la respuesta del sistema inmunitario. Ciertos tipos de cáncer con altos niveles de PD-L1 son buenos candidatos para el tratamiento con fármacos de inmunoterapia que actúan sobre PD-1. Ejemplos de estos fármacos son pembrolizumab y nivolumab.
- Los tipos de cáncer que tienen ciertos marcadores en su superficie. Estos marcadores permiten que las células T con CAR reconozcan a las células cancerosas como una amenaza. Esto aumenta la probabilidad de que el cáncer responda a la inmunoterapia con células T con CAR. Un ejemplo es el marcador de superficie CD19 en la leucemia de células B.
¿Cuáles son los efectos secundarios de la inmunoterapia?
Los efectos secundarios más comunes se deben a que el sistema inmunitario reacciona de forma exagerada contra tejidos normales. Los efectos secundarios son:
- Problemas en la piel, como sarpullido o picazón
- Escalofríos, fatiga (sensación de mucho cansancio) y otros síntomas similares a los de la gripe
- Problemas gastrointestinales, como diarrea (caca blanda)
- Dolor por inflamación de las articulaciones (hinchazón)
La mayoría de los efectos secundarios pueden manejarse de forma segura si se tratan a tiempo. A veces, los efectos secundarios pueden causar daño si no se tratan y afectan órganos como los pulmones.
Los médicos de MSK son expertos en la atención de personas que presentan efectos secundarios por la inmunoterapia.
¿Puede el sistema inmunitario detener el cáncer por sí solo?
El sistema inmunitario lo protege de muchas amenazas. Esto incluye bacterias y virus infecciosos, así como también el cáncer. Las células inmunitarias atacan a las células que parecen extrañas o dañinas. Esto incluye células mutadas que pueden causar tumores cancerosos. El sistema inmunitario muchas veces impide que el cáncer aparezca o crezca.
Sin embargo, las células cancerosas pueden engañar al sistema inmunitario para que no las ataque. Las células inmunitarias tienen frenos que existen para evitar que ataquen a las células sanas. Las células cancerosas pueden activar esos frenos. Las células cancerosas también pueden modificar el microambiente tumoral en el tejido cercano para que sea hostil a las células inmunitarias.
La inmunoterapia puede ayudar al sistema inmunitario a vencer estos engaños y destruir el cáncer.
¿Hay algo que pueda hacer para fortalecer el sistema inmunitario y así mejorar la eficacia de la inmunoterapia?
No hay nada que pueda hacer específicamente para garantizar que la inmunoterapia funcione bien. Algunas investigaciones muestran que las personas tienen mejores resultados cuando mantienen un microbioma intestinal saludable. Puede lograrlo siguiendo una dieta nutritiva con alto contenido de fibra vegetal. Evite tomar antibióticos que no necesite realmente y evite los probióticos.
¿Qué porcentaje de personas con cáncer puede ayudar la inmunoterapia?
Esto depende del tipo de cáncer. En general, la inmunoterapia ayuda a:
- Entre 15 y 30 de cada 100 personas que tienen tumores sólidos comunes. Esto incluye cáncer de pulmón, vejiga y riñón.
- Entre 45 y 60 de cada 100 personas con ciertos tipos de cáncer de piel, así como personas con tumores sólidos que tienen un tipo de mutación llamada MMRd/MSI-alto.
¿Por qué deja de funcionar la inmunoterapia?
Las inmunoterapias pueden dejar de funcionar cuando las células cancerosas cambian y logran evadir las células inmunitarias. Muchas veces, pierden el marcador o los marcadores que las células inmunitarias utilizan para identificarlas. Esto se llama escape antigénico o escape inmunitario.
El cáncer y el sistema inmunitario están siempre en una batalla. La inmunoterapia puede hacer que el sistema inmunitario tenga una respuesta más fuerte para que pueda controlar el cáncer el mayor tiempo posible.