Mi madre era obstetra y ginecóloga, así que ingresé a mi residencia creyendo que me haría cargo de su práctica. Esto cambió durante mi primer año de formación, cuando atendí a pacientes con cáncer ginecológico y aprendí sobre los procedimientos utilizados para tratar estas enfermedades. Vi cómo la calidad del cuidado y la cirugía eran tan esenciales para obtener resultados positivos para estos pacientes, y eso me inspiró a dedicarme a la subespecialidad de oncología ginecológica. Quería desarrollar una experiencia en cirugía avanzada del cáncer de ovario porque vi que esta era el área donde la capacitación, la habilidad, la dedicación y la perseverancia marcaban la mayor diferencia.
En mi práctica clínica tengo amplia experiencia en el uso de técnicas quirúrgicas de invasión mínima. El uso de esta tecnología avanzada nos ayuda a mejorar los resultados de los pacientes con cánceres de ovario, útero y cuello uterino en etapa temprana. Cuando es apropiado, ofrezco a mis pacientes opciones de tratamiento más nuevas, como biopsia del ganglio linfático centinela, cirugía para preservar la fertilidad y cirugía robótica, así como paniculectomías (eliminación del exceso de grasa de la parte inferior del abdomen). Estas técnicas mejoran los resultados, tanto quirúrgicos como estéticos, y, en última instancia, ayudan a mejorar la calidad de vida del paciente.
Cuando los pacientes con cáncer conocido o sospechado, especialmente aquellos con cáncer de ovario avanzado, vienen a verme por primera vez, a menudo les preocupa extirpar el cáncer lo antes posible. Les aseguro a todos mis pacientes que, juntos, decidiremos el mejor plan de tratamiento en el menor tiempo posible. Cuando los pacientes necesitan cirugía, intentamos programar su procedimiento lo antes posible desde la fecha de su consulta inicial. Pero también nos tomamos el tiempo para asegurarnos de que estamos realizando la cirugía adecuada, para no apresurarnos a tomar una decisión. También les recuerdo a mis pacientes que contamos con un equipo de cirujanos, oncólogos médicos, radiólogos, patólogos, anestesiólogos y enfermeras dedicados y todos comprometidos con su cuidado. Como resultado, tenemos algunos de los mejores resultados quirúrgicos para el cáncer de ovario avanzado del mundo. La calidad y cantidad de vida de nuestros pacientes es nuestra máxima prioridad.
Durante los últimos 25 años, he dedicado gran parte de mi investigación a explorar formas de ampliar y mejorar nuestro tratamiento quirúrgico de los cánceres de ovario, de trompas de Falopio y peritoneal. He publicado más de 100 artículos sobre cirugía para el cáncer de ovario y he sido el investigador principal de muchos ensayos institucionales y multicéntricos destinados a mejorar los resultados de los pacientes con esta enfermedad. Además, yo, junto con mis colegas de la Universidad de California, Irvine y UCLA, estamos trabajando en la cuarta edición de nuestro libro de texto, Cáncer de ovario: principios y práctica. Soy editor de otros dos libros de texto, incluido Principles and Practice of Gynecologic Oncology (Principios y práctica de oncología ginecológica), considerado uno de los libros de texto líderes en nuestro campo. He realizado numerosas presentaciones importantes sobre cirugía de cáncer ginecológico a nivel internacional y me apasiona colaborar con mis colegas de todo el mundo.
Algunas de nuestras investigaciones clínicas actuales en MSK incluyen identificar formas de disminuir la necesidad de transfusiones de sangre durante la cirugía, disminuir las infecciones y el estrés en el sistema inmunitario y administrar quimioterapia caliente directamente en el abdomen después de la extirpación de tumores cancerosos. También he trabajado con colegas internacionales para establecer pautas clínicas para determinar quiénes son candidatos apropiados para una segunda y tercera cirugía en casos de cáncer de ovario recurrente. Mi objetivo no es solo mejorar la calidad de vida y la remisión a largo plazo de pacientes con casos difíciles de enfermedad muy avanzada o recurrente, sino también ofrecer esperanza donde antes había muy poca.
Además de mis actividades clínicas y de investigación, he formado parte de muchos comités profesionales nacionales e internacionales, incluida la American Board of Obstetrics and Gynecology, the Society of Memorial Gynecologic Oncologists, la Society of Memorial Gynecologic Oncologists y Gynecologic Cancer Task Force of the American Joint Committee on Cancer. Durante muchos años, he sido director de los cursos quirúrgicos anuales de posgrado de la Society of Gynecologic Oncology, desarrollados para mantener actualizados a los oncólogos ginecológicos de todo el mundo sobre los últimos tratamientos quirúrgicos para pacientes con cánceres ginecológicos. También formo parte del cuerpo docente de la Universidad de California, Irvine, en el curso internacional sobre cirugía citorreductora, así como de la European School of Abdomino-Pelvic Surgery in Gynecologic Oncology, con sede en Italia. Nuestra apasionada misión es mejorar el cuidado y los resultados de los pacientes con cáncer ginecológico, no solamente en nuestros propios países, sino en todas partes.
